Mi cinematográfico romance

AMOR HUMANITARIO

Casablanca (Michael Curtiz, 1942): La quintaesencia del cine hollywoodense, “Casablanca” narra un amor atemporal, humanitario, en el que la solidaridad con la patria y el bien de la raza humana es más fuerte que el beneficio personal. Humphrey Bogart encarna a Rick Blaine, un autoproclamado “ciudadano del mundo”, quien está enamorado perdidamente de Ilsa Lund, la esposa de un líder de la resistencia francesa durante la Segunda Guerra Mundial.
Un breve amorío en la ocupada París termina en decepción. El reencuentro, que tiene lugar en el bar de Rick en Casablanca, Marruecos, es uno de los momentos icónicos del séptimo arte. Una película para siempre, con un impecable guión, lleno de fascinantes diálogos y coloridos personajes secundarios. Inolvidable: La interpretación de “As Time Goes By”, de Dooley Wilson. Si ya la viste, revívela, si no, réntala y disfrútala bien acompañado.

AMOR HISTÓRICO

Lo que el viento se llevó (Victor Fleming, 1939): Épico americano que revive la historia de la Guerra Civil en los ojos de Scarlett O’ Hara, una señorita de sociedad que se convertirá en mujer durante ese turbulento periodo. Esta refinada y rebelde dama, interpretada por la clásicamente bella Vivien Leigh, tiene su futuro asegurado con un noble caballero, pero sus instintos y pasiones están con Rhett Butler - el galán Clark Gable -, un tosco hombre que le advierte que “le hace falta que la besen, bien”. Ella tendrá que decidir entre su orgullo y el amor ardiente que siente por ese misterioso y obstinado individuo. Pasan los años, la guerra no cede y las vastas tierras de los O’ Hara quedan en la miseria, por lo que Scarlett tiene que ingeniárselas para sobrevivir. Matrimonios por necesidad, más que por interés, marcan a la hermosa doncella, pese a la constante presencia de Rhett, amor que no será eterno si ella no se entrega a sus sentimientos más básicos. Grandiosa producción de época, con un romance apasionado y escenas de gran magnitud y poder histórico.


AMOR ETERNO

Historia de amor (Arthur Hiller, 1970): Basada en la novela de Erich Segal, esta cinta es la plataforma moderna para las historias de amor trágico que han hecho llorar a generaciones. ¿Hay algo más triste que la muerte del ser amado? Hombre conoce a mujer, hombre se enamora de mujer, mujer tiene una enfermedad fatal. Él es Oliver Barrett IV (Ryan O’ Neal), un apuesto alumno de Harvard; ella es Jennifer Cavalleri (Ali MacGraw), una vibrante estudiante de música. Ante la adversidad, ellos logran casarse, sólo para descubrir que la joven mujer no podrá tener hijos y sufre un terrible padecimiento. Más que una historia sobre la muerte, “Historia de amor” celebra la vida de esta bella pareja, que se mantendrá junta hasta el último momento. Dato curioso: Es muy posible que el tema musical lo hayas “tarareado” al formar un corazón con tus manos después de un comentario romántico. Ve esta película para que sepas de donde viene esa clásica melodía.

AMOR NERVIOSO

Annie Hall (Woody Allen, 1977): En el año que el “punk” estalló y que “Star Wars” reinó en las taquillas, Woody Allen, un angustiado neoyorquino, presentó la mejor película de 1977: “Annie Hall”. Allen es Alvy Singer, un quisquilloso comediante de la Gran Manzana, quien comienza un poco probable romance con la despistada Annie, interpretada por la excelente Diane Keaton. La película comienza al final de la relación y Alvy nos comenta en primera persona los vaivenes del romance, desde su inusual cortejo hasta el inevitable distanciamiento.
Alvy, de lentes y de baja estatura, es un peculiar personaje: Inseguro, tímido frente a las mujeres y con una filosofía personal ácida y neurótica; Annie, alta y de innegable belleza física, es todo lo contrario pero igual de inusual: Extrovertida, despreocupada, transparente y sentimental, habrá quienes dirán “está loca”. “Annie Hall” es una película agridulce, llena de citas citables, no por nada ganó el Óscar a Mejor Película, venciendo a la antes mencionada saga del espacio. Para corazones impacientes y de mente abierta.